Hemos llevado a cabo, durante este fin de semana, la IV Jornada del Equinoccio, y nos ha resultado maravillosa.
El Sábado por la mañana un buen número de pequeños acudían a la Biblioteca Infantil para ver la obra de títeres representada por los Fitoterapitos de Castañar García Casasola. Estas marionetas, que han nacido ya hace dos años en el Colegio Filiberto Villalobos, de Béjar, quisieron darse a conocer a todos los niños de Béjar en esta jornada en la que nos hablaron de la cadena trófica, es decir, de la importancia que cada ser vivo tiene en la Naturaleza, siendo todos necesarios para mantener en equilibrio la "cadena de la vida", como ellos dicen.
No tenemos fotos, pero intentaremos presentarlos en la próxima ocasión que actúen.
Por la tarde se llevó a cabo la actividad aplazada de la semana anterior; la Ruta de las Fábricas, explicada por el Profesor de la E:U.I.T.I. de Béjar, Javier R. Sánchez. Los asistentes a esta actividad se mostraron encantados, tanto por la belleza que mostraba el río en esta jornada, como por las sustanciosas explicaciones del profesor, a quien desde aquí agradecemos su dedicación.
El domingo, pese a que el día amenazaba con lluvia, realizamos las actividades previstas en La Calzada de Béjar.
Los niños, cerca de una treintena, a los que se sumaron algunos alumnos de CAMPYCO, se quedaron en el Ayuntamiento con Castañar García Casasola y algunos miembros del Consejo de la Juventud para realizar diversos talleres y juegos. Realizaron casitas para pájaros, comederos, dibujos; identificaron trinos y jugaron en la Plaza con los chicos del Consejo.
Los mayores, y también algunos niños muy interesados por la ornitología, emprendieron un paseo por el Camino de Salamanca, como se llama en este pueblo a la Calzada Romana de la Plata, acompañados por Raúl Bueno, que es el especialista en aves que guiaba la excursión. Se pudieron escuchar, y aún ver, gran variedad de especies: buitres leonados, ruiseñor bastardo, herrerillo, verdecillo, carbonero, curruca rabilarga, golondrina, pito real, alondra común, y por supuesto, cigüeñas con vistosos nidos en troncos de árboles muertos.
El número de los participantes era bastante elevado, lo que dificultaba el avistamiento de las aves, que se espantaban a nuestro paso, sin embargo, el paseo sirvió para despertar el interés en todos los presentes por estos animales a los que tantas veces ignoramos, y que aportan una gran biodiversidad a nuestro medio ambiente. Sólo escuchar sus trinos bien merece un prolongado silencio.
De vuelta a La Calzada Raúl Bueno obsequió a los participantes con su libro Las aves de la Sierra de Béjar, que además firmó y dedicó con todo cariño. Muchísimas gracias, Raúl.
Para finalizar la jornada se realizó una exhibición de aves rapaces por parte de D. José María González y D. Antonio Santana, destacados miembros de la Asociación Nacional de Cetrería. En sus manos pudimos observar dos halcones peregrinos y otros dos halcones jerifaltes, que impresionaron a todos los presentes por su belleza.
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