Nuestro río te lleva. Sábado 10 y Domingo 11 de Mayo

Quizás porque esta III Jornada de Equinoccio estaba dedicada a nuestros ríos, el agua ha querido hacer acto de presencia de un modo notorio.

La Ruta de las Fábricas, programada para la mañana del sábado, tuvo que ser aplazada debido a la persistente lluvia que no dejó de caer durante todo el día. De todos modos, haremos la Ruta de las Fábricas siguiendo las explicaciones de Javier Sánchez el próximo sábado, dia 17, a las 18:00.

Por la tarde nos encontramos en el Convento de San Francisco para asistir al audiovisual que Jesús Arana ha preparado, a lo largo de varios años, acerca del río Cuerpo de Hombre. Valiosas imágenes para mostrarnos con muchísimo cariño, el discurrir de nuestro río, desde su nacimiento en las charcas de Venerofrío, atravesando montes y prados, la ciudad de Béjar en un paso jalonado por numerosos edificios industriales a los que en otros tiempos abasteció de fuerza motriz, hasta su desembocadura en el río Alagón.

Y, aunque con grandes dudas por culpa de este tiempo inestable de primavera, el domingo celebramos la excursión que estaba programada a la Dehesa de Horcajo. En torno a cincuenta valientes, sin miedo a los posibles chaparrones, siguieron las explicaciones de Tomás Diaz acerca del uso tradicional que el hombre ha hecho de las dehesas, modo ancestral de aprovechamiento sostenible en el que el hombre obtiene los recursos necesarios sin esquilmar a la naturaleza.

La dehesa de Horcajo, pese a la luz tamizada por el nublado, se nos ofreció espléndida. Fresnos y robles estrenando hojas de intensos colores verdes, un tapiz vegetal salpicado de jacintos silvestres y peonías, numerosas aves alegrando con sus trinos el paseo... Bucólica exposición, ¿verdad?. Pero es el retrato exacto de lo que teníamos ayer ante nuestos ojos.

Visitamos el molino, aunque no estaba en funcionamiento. Y nos acercamos al río Sangusín que bajaba alegre entre los grandes riscos sobre los que se asienta el molino.

Después de tomar un pequeño aperitivo iniciamos el regreso hacia Béjar, ya que aunque habíamos programado comida y juegos en la dehesa, la lluvia amenazaba con volver a acompañarnos.

Cerramos, pese al aplazamiento de la Ruta de las Fábricas, una jornada más de Equinoccio con una gran satisfación; el trabajo bien hecho y una gran aceptación por parte de los participantes. Nos vemos en la próxima jornada en la que conoceremos las aves de nuestra comarca.